miércoles, 13 de mayo de 2009

Movida 41: basado en hechos reales


Corría el 2000.
Pagábamos en pesetas, habíamos sobrevivido a la supuesta rebelión de las máquinas, se estrenó Gran Hermano y ese año también fue el de menos lluvias desde no sé cuando, o el de más, o el peor en no sé qué. Vamos, lo de siempre.

El caso es que mi primer C.O.U. (para los más jóvenes: 2º de Bachillerato pero sin la asignatura Pinta y colorea) ya se iba suspendiendo solo y no hacía falta que yo fuera al instituto. Vamos, que tenía mucho tiempo libre para mis cosas.
A los dos días descubrí que yo no tenía “mis cosas” y empecé a buscar ocupaciones.

Como trabajar era muy cansado y, además, me daba repelús pensar en mi mismo como víctima del fracaso escolar, decidí desarrollar mis aficiones (antes no decíamos hobbys).

De siempre me ha gustado la radio y dije intrínsecamente hablando: “¡Qué demonios, veamos cómo se hace por dentro!”

A partir de aquí se sucedieron un montón de visitas a los estudios de M80 a ver Gomaespuma (no obviemos el detalle: la cosa empezaba a las 7 de la mañana. De lo que se deduce que la juventud no es vaga, sino que sólo hay que motivarla para que se levante a las 5 sin que nadie les achuche).

Era guay. Por allí desfilaron artistas varios, ministros, escritores y todo lo más granado que por aquel entonces tenía algo que vender.

Total que, en una de esas, cuando se acabó el programa, salí del estudio y me metí en el de Hoy por hoy, dirigido por Iñaki Gabilondo (para los más jóvenes: el señor de imponente flequillo que presenta las noticias en Cuatro).

Y me senté y fue pasando el rato y una excursión de chavalillos y unos señores y un camarero y los de la sección de deportes y, y, y… y yo, allí. Tan pancho.

Hasta que, al filo de las 12, Iñaki (yo le llamo Iñaki, qué pasa) se levanta y se acerca. Me levanto también, nos damos la mano y me pregunta que qué tal, que cómo me llamo, que qué me gustaría hacer de mayor y un montón de cosas más que sólo se le pueden ocurrir a un periodista.

De pronto, una voz metálica. Era el técnico de sonido.
-Ya hemos conectado con Ibarretxe. Cuando quieras empezamos.

Iñaki, apurado por las prisas se disculpó por dejarme con la entrevista de calado a medio hacer.
-Perdona, pero es que está el lehendakari esperando y tengo que ir…


Y atentos porque aquí viene EL MOMENTO, uno de los más grandes que he vivido, seguro que el que más veces he contado.

En ese instante, una fuerza superior se apoderó de mi cuerpo y de mi voz.
Con la mano derecha le di un apretón de manos, con la izquierda le cogí el hombro y, mientras hacía todo eso, le dije:

-Tranquilo… Iñaki… ¡ve!

Sí, nenes, en ese momento mágico fui EL CHAVAL QUE LE DIO PERMISO A IÑAKI GABILONDO PARA QUE ENTREVISTASE AL LEHENDAKARI IBARRETXE.


¡Fuá!

6 comentarios:

  1. Es recordar este relato y se me llenan los ojos de lágrimas y se me pone sonrisa de fan quinceañera encerrada en el ascensor con Bisbal...
    No dejes nunka de kntar esto xq a mí me hace feliz!! te envidio!! YUUUH!!! bravo!!! plas plas plas!!! YUHUHUUUU!!

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  2. Impresionante testimonio.... Espero que Iñaki lea esto y deje algún comentario de agradecimiento al respecto.

    Imagínate lo que le habría pasado a su carrera de periodista si te da por decir: "Iñaki, cojones, que soy de Fuenla, de aquí no se mueve ni dios!" (se habría tenido que quedar)

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  3. ¡Prometo contaros la historia cada vez que os vea y, si el destino tiene a bien unirnos en la misma habitación de la misma residencia de ancianos, prometo contárosla todos los días a todas las horas hasta que decidáis matarme a golpes con una cuña de las de mear!

    ¡Sois más majos que las pesetas!

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  4. Buenas chaval. Cuantisimo tiempo. Esta bien la historia y me ha recordado aquella época en la que hibamos (bueno tu hibas a la clase de al lado) a COU. Ha estado bien pero me he sentido mazo de viejo (lo cual no te creas que me ha gustado tanto), pero es una gran historia y en el momento de... "tranquilo iñaki ve" me ha parecido hasta verte diciéndolo. Un abrazo tio

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  5. Ey primo que morro tienes viviendo en Madrid... aqui los de provincia... en fin sin comentarios... pero ¿sabes qué? Por lo menos en Benidorm tenemos playa!
    oye... he notado que Ibarretxe se parece un poco al Dr. Spock, no crees??

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  6. Josele: sí, nos hacemos mayores. Esto es así, pero, bueno, tenemos que pensar que hay gente que es más mayor que nosotros. Peor p'a ellos.

    Un abrazo grande y encantadísimo de leerte.

    Don primo: sí, tú como el resto de los cuarenta y pico millones de españoles, también te has dado cuenta. ¡Estarías en la PLAYA cuando los demás nos fijamos! Jeje

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