viernes, 29 de octubre de 2010

Movida 86: cosas de inadaptados.

Estas últimas semanas, no sé por qué (o sea, sí sé por qué, lo que no sé es por qué se ha concentrado en el tiempo), he dedicado los minutos tontos del día en cosas que hacen los que llevan las gafas pegadas con un celo, que no tienen amigos (físicos) y que, además, van con el pelo como si sus madres aún les peinasen.

Why?

Por este orden:

1. Hace unos días asistí a la presentación de "Daño Gratuito" de Paco Alcázar (Editorial Diábolo, unos 16 euros. ALTAMENTE recomendable). Fui solo y la cosa era en el sótano de una tienda con sus chavalotes de casi 40 años jugando al rol en una esquina y todo. Si os digo que no me pareció bien/entretenido, estaría mintiendo como un bellaco.



2. La polémica, de cacafuti, que suscitó Arturo Pérez Reverte en Twitter con lo de Moratinos (que le llamó llorón y mierda y un montón de cosas de esas que harían que su madre le lavase la boca con jabón Lagarto) me llevó a abrir mi propia cuenta en esa red social. Una vez dado de alta, recordé que un dibujante que publica en El Jueves (Manuel Bartual) tiene un blog en el que cuelga las cosas que le parecen curiosas o graciosas. Y entre estas cosas, frases que le llegan a su Twitter. Total, que guiado por el consejo que mi madre "hijo, si quieres algo, pídelo. Qué no soy adivina"...


Y 3. En la portada del número 1.740 de El Jueves aparecía Zapatero. Fijaos en sus manos.

Ante ese fallo, lo que me gusta su autor y las ganas de hacer el memo un rato que tenía; mandé un mail a la sección que destinan a los lectores. Y me la han publicado en el número de esta semana (1.744). Mira tú.



Otros inventan vacunas o entrenan hasta llegar a ser los número uno o ganan Premios Nobeles. Y yo... bueno... al menos no me dedico a robar.

miércoles, 20 de octubre de 2010

Movida 85: Rimembar (V). Chabel, Chabel, ¡qué bien!

Dinero no tengo, tampoco acciones en grandes compañías (ni en pequeñas) y si alguien me preguntase “¿al menos poseerás fincas y todoterrenos para ir de cacería con gentes importantes de-las-de-toda-la-vida?”, mi respuesta sería que “naranjas de la China”.

Ahora, eso sí, hermanas tengo a puñaos. Un montón de ellas. Y todas nacidas en los ochenta. Lo que pasa es que a un par lo poco que les pilló se lo pasaron tratando de controlar sus respectivos esfínteres y ni se acuerdan de las hombreras, ni de la laca, ni de Corrupción en Miami, ni de nada que no fuese tan de los noventa como “La Macarena” o, qué sé yo, el suicidio de Kurt Cobain.
Sin encambio, la más mayor, sí.

Si tú me mandas el típico Power Point con juguetes de aquellos años, lo que no tuviese yo, lo tenía ella.

Y entre todas esas cosas no podía faltar la muñeca segundona que ni por fama ni por estatura podía hacerle sombra a la todopoderosa Barbie de Mattel.
Hablamos, claro, de Chabel de Feber.

En esos años tan convulsos en los que los tíos hechos y derechos trataban de aclararse con si entrar o no en Europa o si las nucleares molaban o no, a mi se me ponía la cabeza loca porque no entendía por qué habían sacado una muñeca (con complementos, hermanitos mellizos, novio y hasta caballo) de la hija de Julio Iglesias.

Algunos años después, siempre desde mi ignorancia silenciosa, ya vi que Chábeli no tenía nada que ver con el asunto. De hecho, para cuando pusieron a la venta estos juguetes, ya hacía una pila de años que la tipa había mutado de niña a mujer.


Si la Biblioteca Nacional quiere éste ejemplar para su archivo, que me llamen con la cartera bien llena de billetes.

lunes, 11 de octubre de 2010

Movida 84: sigo vivo, gracias.

Pues sí, hijos e hijas mías, por aquí ando. Y no, no me he olvidado ni de ustedes vosotros ni del blog.
Lo que pasa es que, por-lo-que-sea, no cuelgo cosas. O no aquí. Porque, claro, como sois así y ninguno le pasa la dirección de esto (lasmovidasdedaniel.blogspot.com) a alguien dispuesto a darme dinero por hacer pluriempleos de cosas de mucha risa ya sea oralmente hablando (si las emisoras de radio me tientan, voy) o escritamente hablando (si las revistas me tientan, voy), pues, claro, me entretengo en otras historias que:

a) Me hacen ganar un sueldecillo.





b) Me hacen gastar parte del sueldecillo.



Más fotirris comentadas aquí.

En otro orden de cosas, os diré que en mi casa estamos la mar de contentos con el Nobel que le han dado a Vargas Llosa. ¿Qué por qué? Pues porque, como sabéis, mis contactos con lo más selecto de cada barrio son muchos y variados y con "mibuenamigoMario", no iba a ser menos, naturalmente.


Juan Carlos es mi señor padre, por cierto.